top of page
Foto del escritormeviterapia

Impulsividad en el Adolescente

¿Alguna vez te has preguntado qué información necesitas para comprender a un adolescente que muestra signos de impulsividad? Los niños y adolescentes tienden a ser más vulnerables a las recompensas inmediatas, y esto tiene una explicación. En esta publicación, te hablaré del ¿por qué ocurre?, sobre la explicación neurocientífica que hay detrás de ello y te proporcionaré tres estrategias útiles para comprender y abordar la impulsividad en los adolescentes.


Impulsividad y Adolescencia


Primero, definamos qué son las recompensas inmediatas

Estas recompensas se refieren a beneficios o gratificaciones que se obtienen de inmediato o en un corto plazo después de realizar una acción o tomar una decisión. A diferencia de las recompensas a largo plazo, las recompensas inmediatas se experimentan en un período de tiempo muy cercano y suelen tener un efecto gratificante. Esto puede influir en la toma de decisiones, llevando a las personas a buscar la satisfacción inmediata en lugar de esperar recompensas futuras más grandes o a largo plazo.


Por ejemplo, cuando sientes sueño o cansancio, es probable que pienses inmediatamente en tomar una taza de café para sentirte mejor. Esta respuesta es una reacción a una señal que tu cuerpo detecta. Sin embargo, a veces puede ser complicado identificar la señal subyacente que impulsa un comportamiento impulsivo. Ahora, compararemos esta idea con la impulsividad en los adolescentes.


¿Qué es la impulsividad?


En el contexto de la impulsividad, en los últimos años, ha surgido una amplia comprensión de este concepto, que abarca desde el fuerte deseo reiterativo de realizar una acción hasta la toma rápida de decisiones y la participación en conductas de riesgo (Salvo & Castro, 2013).

"Hay que tener en cuenta que el impulso es el vehículo de la emoción y que la semilla de todo impulso es un sentimiento expansivo que busca expresarse en la acción.” - Goleman, D.

Pueyo (2003) señala que la impulsividad está presente en diversos trastornos, como el comportamiento antisocial, la violencia, el trastorno por déficit de atención e hiperactividad, y los trastornos por abuso de sustancias, entre otros.


Las personas que muestran impulsividad en su comportamiento podemos ubicarles en dos niveles, según Squillace et al. (2011):

  • Nivel conductual: En este nivel, se observa una limitada sensibilidad a las consecuencias negativas que puedan resultar de sus acciones. También presentan un tiempo de reacción corto, lo que dificulta un análisis adecuado de la información, tanto de estímulos internos como externos.

  • Nivel social: A este nivel, la impulsividad se entiende como un comportamiento arraigado en la dinámica familiar. Los menores aprenden desde la infancia a reaccionar de manera instintiva o rápida para obtener lo que desean.

¿Qué ocurre en la neuroquímica del cerebro que provoca la impulsividad en un adolescente?



Durante la infancia y la adolescencia, la corteza prefrontal, la región cerebral encargada de controlar los impulsos, no se encuentra plenamente desarrollada. Esto significa que, al igual que las personas que experimentan estrés o padecen ansiedad, los adolescentes pueden enfrentar dificultades para ejercer un control adecuado sobre sus impulsos. Esto se debe a lo que se conoce como "secuestro amigdalino", donde la amígdala toma el control sobre la corteza prefrontal, dando prioridad a las respuestas emocionales por encima del razonamiento. En otras palabras, actúan guiados por sus emociones en lugar de cuestionarlas y tomar el control de la situación, algo que implica un mayor nivel de razonamiento.


La adolescencia es una etapa en la que estas habilidades cognitivas están en constante desarrollo, y es aquí donde los adultos pueden desempeñar un papel crucial en su formación. Sin embargo, cuando un adulto enfrenta dificultades en lidiar con la impulsividad de un adolescente, es altamente recomendable buscar apoyo psicológico. En muchos casos, los propios adolescentes llegan a ser conscientes de su necesidad de ayuda y pueden solicitar el apoyo de sus padres para acudir a sesiones de terapia psicológica.


3 Estrategias para ayudarte a comprender mejor la impulsividad en los adolescentes:


  1. Comunicación efectiva: Fomenta una comunicación abierta y sincera. Escucha sus preocupaciones, pensamientos y emociones. Anímale a expresar sus deseos y metas a corto y largo plazo. Esto te ayudará a comprender sus motivaciones y a identificar situaciones que puedan desencadenar comportamientos impulsivos.

  2. Educación sobre las consecuencias: Trabaja en conjunto con el/ella para explorar y comprender las consecuencias a corto y largo plazo de las acciones impulsivas. Anímale a reflexionar sobre cómo sus decisiones pueden afectar sus objetivos y relaciones. Esto le ayudará a tomar decisiones más informadas y a considerar las consecuencias de una situación antes de actuar.

  3. Desarrollo de habilidades de autorregulación: Ayúdale a desarrollar habilidades de autorregulación emocional y toma de decisiones. Por ejemplo, incluir técnicas de mindfulness, técnica del semáforo y la práctica de la respiración lenta y profunda en conjunto. Continuar fomentando la planificación a corto y largo plazo juntos también puede ser beneficioso para reducir la impulsividad.

Buscar ayuda te permite tener mayor calma y orientación


Finalmente, la adolescencia es una etapa de cambios sociales, emocionales y físicos, en la que los jóvenes son más propensos a experimentar dificultades que afectan su salud mental. Esto puede dar lugar a comportamientos impulsivos, incluso ideación o riesgo suicida (OMS, 2019). Por lo tanto, es fundamental buscar la ayuda de un profesional de la salud mental y actuar con prontitud frente a la impulsividad.



33 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comentarios


bottom of page